Es muy fácil perder partes importantes de la Carta de san Pablo y también en el evangelio de san Lucas.
Qué maravilloso pasaje poético en Isaías, ya que habla acerca de las bendiciones que se nos otorgarán cuando la madre cuida de sus crías. Me recuerda a las propias palabras de Jesús que oró sobre Jerusalén más adelante mientras contempla cómo el amor de su vida, Jerusalén, la gente y la raza que tanto ama, ha traicionado un gran amor.
Esta oración es la oración de un corazón quebrantado cuando dice: "Jerusalén, Jerusalén, tú que matas a los profetas y apedreas a los que te han enviado, con qué frecuencia he deseado reunir a tus hijos, como una gallina junta sus polluelos debajo de sus alas; y no estabas dispuesto ".
Y aún así, sigue amando Jesús como incluso una madre espera la eventual redención de su hijo descarriado, su hijo perdido por las distracciones de ... el amor que se necesita para ser crucificado con él. El amor que se necesita para comprender que fuimos hechos para algo más allá, pero que solo puede lograrse por su gracia a través de las marcas de la cruz. Solo entonces veremos que las palabras poéticas de Isaías se hacen realidad.
Entonces, ¿cuáles son las palabras o las partes de la carta de Pablo y el Evangelio que son fáciles de perder?
En inglés, las palabras no se traducen como puramente. Las palabras en inglés dicen algo al efecto: “…de ahora en adelante, no dejes que nadie me cause “problemas;” porque yo llevo las marcas de Jesús en mi cuerpo.”
Pero el español contiene la palabra que es más importante ... aclara " con la palabra "obstáculos" ...
El leccionario español dice: "De ahora en adelante, que nadie me ponga más obstáculos, porque llevo en mi cuerpo la marca de los sufrimientos que pasó por Cristo".
¿Cuáles son esos objetos, esos obstáculos? Pueden ser muchas cosas mientras intentamos simplificar nuestro breve viaje. Jesús piensa que los límites de su vida pública son solo tres años. Así que debemos pensar en nuestras vidas de la misma manera ... que solo tendríamos un tiempo muy breve para lograr tanto.
Es por eso que les dice a los apóstoles, no se lleven nada con usted, ni personal, ni sacos, --- y dependan completamente de Dios cuando lo guíe a través del bosque lleno de lobos -- que representan la muerte misma y mucho mas -- a medida que avanza y ofrece a aquellos a quienes visita, curación. ... sanando a aquellos que están sin Dios, sanando a aquellos que están solos, sanando a aquellos que están físicamente enfermos también. Curándolos por ser extensiones del reino de Jesús que Él ha traído a la tierra.
La extraña línea en la lectura es la que les dice "no saludar a nadie en el diario". Qué poco caritativo suena eso.
Pero lo que Jesús está diciendo es que no hay suficiente tiempo para que te distraigas con una conversación sin sentido, a menos que esa conversación abarque la misión de sanarlos con Su amor y dejarles saber del Reino.
Jesús también les dice que serán rechazados, expulsados y rechazados ... que son las marcas de la cruz a la que se refiere San Pablo. Cada uno, cada azote, cada rechazo, te permite no alardear más en ti mismo, sino en el crucificado que te da las entradas a la vida eterna.
No hay una "entrada" al cielo separada de la cruz, y las principales distracciones de esa "entrada" son nuestro propio ser; nuestra autocompasión que nos impide avanzar en nuestro camino de la vida; nuestra ira, hasta nuestro luto; Ciertamente nuestro orgullo, nuestro deseo de éxito; nuestro deseo de honor; nuestro deseo de riquezas: estas son las personas que encontramos en el camino que Jesús nos advierte que no saludemos.
Ten cuidado de que los lobos no se vean como lobos y que lo que sientas que es bueno -- no siempre es bueno. No te distraigas con tu pobreza o tus riquezas; tu amor humano o tu disgusto; su generosidad que puede engañarlo fácilmente para que piense "usted es el generoso" y no Dios.
Tenga cuidado de no estar convencido de poder salvar la palabra. Jesús te envía como anónimos, como trabajadores, para recoger la cosecha, -- no para administrar la cosecha.
Cuidado porque Los lobos se verán como ovejas. Tenga cuidado de usar sus heridas y no tenga miedo de ser solo un fanfarrón -- solo en Cristo crucificado.
¡Que Viva Cristo Rey!
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